El viernes 9 de abril del 2010 iba a quedar en la historia de conciertos de Costa Rica, cuando Guns N’ Roses tenía planeado presentarse en el país, por primera vez en su historia. El escenario sería el estadio Ricardo Saprissa, los teloneros de la velada serían entonces Sebastian Bach y Gandhi.
No obstante, el concierto se pospuso. Originalmente se reprogramó por la productora del evento para el martes 13 siguiente, tomando la cita que estaba prevista para Guatemala, donde la función se canceló. A la postre, la nueva fecha también se suspendió y finalmente se canceló.
Cuando Guns N’ Roses tenía previsto entonces visitar Costa Rica estaba promoviendo su álbum “Chinese Democracy”, lanzado casi un año y medio antes. El grupo liderado por Axl Rose solo mantenía al cantante de la que fuera su alineación clásica, al poseer los derechos del nombre de la banda.
Las razones precisas de la cancelación siguen siendo inciertas hasta el día de hoy, por como se manejó la información. En su momento trascendió por algunos medios que el grupo no había ingresado al país previo al concierto. No obstante, hubo versiones que al menos Axl Rose sí había estado dentro del territorio nacional para esa fecha.
Oficialmente personeros por parte de la productora a cargo del evento afirmaron que el concierto se pospuso debido a que el escenario no cumplía con las condiciones necesarias para garantizar la seguridad de los intérpretes y los asistentes. La decisión habría sido alabado por los músicos, cuando Guns N’ Roses se manifestó en sus cuentas oficiales. El concierto inicialmente se atrasaría unas horas por un problema en el techo de la tarima.
Guns N’ Roses – Chinese Democracy (Live)
No obstante, la empresa contratada para construir el escenario para el concierto contradijo esas palabras. Así, afirmaron que cumplían de sobra las especificaciones dadas y las exigencias mínimas para este tipo de eventos. Que si el concierto se canceló fue por alguna otra razón, menos por culpa de la tarima.
Al siguiente año se llevó a juicio la cancelación del concierto, demandando a la empresa productora por parte de afectados. La justificación fue tanto por la no realización del evento como por la no devolución del dinero de sus entradas. La demanda se hizo desde mayo del 2010, pidiendo entonces aproximadamente 12 millones de colones.
La organizadora de la actividad en aquel momento fue 28 Producciones, empresa liderada por Juan Carlos Campos. El empresario sería exjefe de campaña de Fabricio Alvarado en su campaña electoral, luego cobrando al partido Restauración Nacional unos $300 por honorarios y gastos no cancelados.
Después de la cancelación del concierto de Guns N’ Roses, Campos ha realizado otros eventos con otras productoras. Entre sus conciertos se incluyen el de Ricardo Montaner, que terminó de forma abrupta apenas cerca de la mitad del repetorio previsto por el intérprete. También estaba a cargo de la presentación de Vicente Fernández, igualmente cancelada.
En aquel entonces, aficionados a la banda se habrían manifestando, a su manera, acerca de la situación vivida con la frustrada presentación de cuando Guns N’ Roses iba a tocar en Costa Rica por primera vez. Incluso con imágenes parodiando una campaña hecha por el periódico La Nación.
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